Historia de Nuestra Iglesia

La IEU-SL tiene raíces en el Sínodo de Missouri desde 1905 la cual abandonó la isla en la década de los sesenta. In 1989, se organizó la Iglesia Evangélica de Confesión Luterana en Cuba y fue reconocida por el Concejo Ecuménico de Cuba en 1990, el mismo año en que tres pastores fueron ordenados. Una crisis en 1995 llevó a la división en 1996 bajo diferencias doctrinales, éticas y administrativas. Líderes y lideresas de cinco congregaciones decidieron dejar la iglesia y organizarse. en 2003, se funda la IEU-SL y fue legalmente reconocida por la Dirección Nacional de Asociaciones Nacionales en el Ministerio de Justicia de Cuba el año 2012.

La IEU-SL es miembro del Consejo de Iglesia de Cuba (CIC) y observador en el Consejo Latinoamericano de Iglesias (CLAI). Cuenta con 1500 miembros, 11 congregaciones en siete provincias, 7 pastores/as ordenados/as (2 varones y 5 mujeres y entre ellos/as un Obispo y una Obispa Auxiliar), seis diaconos/as ordenados/as (2 varones, 4 mujeres), y quince personas predicadoras. El trabajo ministerial se enfoca en trabajo con mujeres, juventud, varones, música, educación, diaconal (VIH y proyecto Joel) evangelismo, ecumenismo y visitas. La promoción ecuménica se da a través del CIC promoviendo la capacitación del liderazgo enfocado especialmente en la juventud. La IEU-SL mantiene buenas relaciones con la Iglesia Católico Romana.

La IEU-SL recibión profesores del Seminario Concordia de San Luis Missouri y del Seminario Luterano en Argentina. Dada la práctica de la ordenación de la mujer al ministerio de la Palabra y el Sacramento, la IEU-SL terminó sus relaciones con Missouri el año 2010.La IEU-SL está bien posicionada en la sociedad cubana promoviendo los dones y talentos de la juventud y la niñez especialmente a través de la música como un aspecto importante para la participación y la afirmación de valores cristianos. La IEU es un cuerpo autónomo y su objetivo principal es el crecimiento de su membresía al estar acompañada de hermanas iglesias a nivel mundial. El Gobierno Cubano a través de su Oficina para Asuntos Religiosos está muy conectada a la iglesia reconociéndola como ejemplo y valorando su manera integral de llevar adelante la misión de Dios.